Embarqué en el crucero dispuesto a desaparecer, pero en
pocas horas, cuando estaba a punto de precipitarme al mar, el azul pintado de azul de tus ojos, igual que sonaba en cubierta,
invadió mi mundo y aquellos días se llenaron de color. Del turquesa de las
cúpulas de Santorini y del reflejo lapislázuli de la cueva de Corfú. Celeste
durante el día y cobalto al atardecer. Azul. Todo tan azul como los tentáculos eléctricos
que nos esperaban agazapados entre las olas y transformaron nuestras vidas. Concediéndome
un motivo para vivir. Recluyéndote en esta habitación tan pálida.
Mi participación de esta semana en las BSO de La Ser.
Izaskun, has conseguido que adore el color azul. Qué imágenes tan bellas; yo también me tiré por el azul bello en unas pupilas, en el mar... venga, que la semana que viene te toca!!!
ResponderEliminarEs lo que tiene el azul, que es de un evocador... Gracias Bequér-lauren. Ójala nos veamos en las ondas jjaja.
EliminarBesos mil
Preciosas imágenes, Izaskun. Un beso
ResponderEliminarMuchas gracias Concha, me alegro de que te hayan gustado.
EliminarBesotes