Cuando las vacas salen de paseo de Maritza Soler

miércoles, 30 de octubre de 2013

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Este año más que nunca, me ha dado por leer libros de relatos. Ya llevo unos cuantos, y la verdad es que no me canso de descubrir cómo de una u otra forma los autores y sus historias me van sorprendiendo. El último libro de relatos que he leído es este “Cuando las vacas salen de paseo”, y para continuar con la racha, también me ha gustado.

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Maritza Soler (1955, La Habana) Investigadora viróloga, comenzó a escribir ficción en 2006, publicando su primera obra “Cuando las vacas salen de paseo”, un libro recopilatorio de relatos en este 2013.



Se trata de una obra que une treinta y tres relatos cortos cuyo aglutinante es la fantasía entendida desde el realismo mágico en algunos cuentos, la ciencia-ficción, o la imaginación llevada a su máximo exponente en otros. Lo que hace interesante estos relatos es la prosa de Maritza que es sencilla y fluida. Encadena las ideas con soltura y naturalidad, por lo que los treinta y tres relatos son fáciles en su comprensión y lectura.
Evidentemente, es imposible analizar aquí todos los relatos, por lo que me centraré en comentar los que a mi juicio han sido los mejores. En “La señora Eloísa salió de compras” nos encontramos de frente con una visión fantástica sobre el paso del tiempo y la posibilidad de tenderle una trampa. Sin embargo, pese a lo que pudiéramos esperar, la autora aquí le da una vuelta de turca puesto que la trampa que se intenta imponer no es para rejuvenecer, sino para parecerse cada vez más al grupo de pertenencia de la protagonista, a sus amigas, sumergiéndose de este modo en un absurdo llevado a sus últimas consecuencias, pero que es tan real como palpable a nuestro alrededor. Por querer parecernos a la masa, al grupo que adoramos, perdemos finalmente cuanto somos, condenamos nuestra identidad.
En “Breve historia sobre bocas y mordazas” la escritora nos presenta mediante una metáfora (un recurso que utiliza en varios de sus relatos) muy bien diseñada una crítica social importante en la que explica las situaciones actuales de la sociedad de una forma curiosa y detallada, sin dejar nada en el tintero.
“Paula en los márgenes” en cambio, es un relato en el que por desgracia, la fantasía no tiene cabida. Es un relato duro, pero escrito desde la dulzura que destila Maritza en todos sus cuentos. Habla de la vida a la que se ven abocadas decenas de mujeres a las que  no se les permite ni tan siquiera ser dueñas de sus cuerpos. Mujeres que día a día sufren una rutina denunciable, que no comprenden, pero que aceptan sin discusión. Y la necesidad de amor y de ternura de estas mujeres, de Paula, traspasa las páginas virtuales del libro y llegan al fondo del corazón.
Casi de igual forma, en “Alice cuenta” nos encontramos con una mujer que, desde su perspectiva de quien acepta sin resistencia el destino que le ha tocado en suerte, nos narra el difícil tema del maltrato. Un relato que, por la forma en que lo vive la protagonista me ha puesto los pelos de punta.
También hay otros relatos que aluden más a la fantasía como tal. Por ejemplo “Un espacio, los dedos y Sebastián”, donde lo angustioso es que todo aquello que parece improbable puede en cualquier momento convertirse en realidad, como que tu propio cuerpo se rebele y que parte a parte, elija su propia forma de morir. Un cuento lleno de originalidad.
Y finalmente, el relato que da nombre al libro, “Cuando las vacas salen de paseo” nos transmite un cambio de roles en el que lo más impactante para mí no ha sido que las vacas salieran de paseo, o que los humanos tomaran el papel de los rebaños, sino que todos ignorasen cuál ha sido el motivo por el que el mundo ahora se organiza en este nuevo orden.
Un libro curioso, ingenioso, descabellado y provocativo, como promete su título.

4 comentarios :

  1. No conocía el título y me ha llamado la atención. Además simpatizo con las vacas :D

    Gracias y un saludo

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    1. Ja, ja, ja, Ana! Eres mundial. Si te animas ya nos contarás qué tal.
      Un beso

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  2. Me animaría con el libro, sin duda, si estuviese en formato papel. Ya sabes de mis manías...
    Un abrazo,

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    1. Bueno, Carmen, lo tendré en cuenta para próximas ocasiones (a ver si hay ediciones digitales y en papel) para no dejarte con las ganas.
      Un besote

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