El mensaje era claro, conciso, breve y letal: no insistas, decía una voz bajo las arcadas. No lo toques, déjalo. Pero aquel objeto singular y desconocido la atraía como un poderoso imán. Desoyendo sus consejos, lo tomó entre los dedos y, lo acercó a su rostro. Se encogió de hombros. ¿Qué tendría aquella pequeñez para que él mudara su habitual desánimo por una moderada alegría? Un ruido inesperado la sobresaltó y, asustada, soltó la esfera.
—Pandora— dijo el anciano—, ¿qué has hecho?
Tras la muchacha, el hombre que portaba un bote herrumbroso y lleno de agua contemplaba con desconcierto la promesa de su cena estrellada sobre los adoquines.
Mi despojito semanal para REC.
Eso sí que es un huevo estrellado. Buen relato, que debe leerse después de desayunar. Si no, además de desazón, produce un hueco en el estómago demasiado molesto. Enhorabuena.
ResponderEliminarGracias Juanjo. Te doy la enhorabuena por ese hueco, que a mi parecer, se llama conciencia.
EliminarUn besote
Salvando las distancias, que son muchas, me ha recordado al chiste de aquel padre que promete comprar un jamón a sus hijos, a lo que ellos, poseídos de una gran algarabía, responden: eso papá y nos montas. Perdona el chascarrillo, no me he podido contener, pero te ha quedado un micro muy original para una frase de difícil hilván.
ResponderEliminarBesos.
;) Nada que perdonar, Juancho, hombre. A cada cual, una lectura le sugiere algo diferente, y me alegra ver que este micro es capaz de tocar ambos lados del péndulo: el humor y el desazón.
EliminarGracias por comentar.
Un besote
La caja de Pandora de nuevo llena de miseria. Con lo difícil que está siendo cenar decente para muchos hoy en día... A ver con qué nos sorprendes la próxima semana.
ResponderEliminarAsí es, Loren. No por ser un conocido y lejano personaje mitológico es menos real esta Pandora. Ójala tan solo la leyeramos en los libros y hubiera menos miseria en el mundo. Muchas gracias por comentar, Loren, para la próxima semana estoy flojísima de ideas. ¿Será que cuanto más difícil es la frase, tanto más fácil es imaginar una escena? ¿O seré una raruna? Ay! Qué dilema...;)
EliminarBesos mil y suerte para esta semana, championman.
Hola, Izaskun.
ResponderEliminarPues a mí me hace volver la cara y pensar en los que tienen poco o menos que nada.
Es tremendo, pero es cercano y real.
Ojalá que el 2015 alivie un poco a los que peor lo pasan.
Besazos, reguapa, que el micro es brutal.
Amén, Towi. Espero que este 2015 sea un poquito mejor para todos.
EliminarBesicos
Muy bueno, Izaskun. Original planteamiento y dura reflexión. Un abrazo, guapa
ResponderEliminarGracias Concha, eres un amor.
EliminarBesicos mil.
¿De qué sirve la esperanza encerrada en una caja? ¡Vamos digo yo! Es difícil tratar estas cuestiones trascendentales que sin duda dan mucho juego. La curiosidad de Pandora fue quizás el origen de todos los males de la humanidad? No había sido una manzana?
ResponderEliminarFelicidades por hacerlo así, aunque sea con este planteamiento cruel.
Besitos. Te deseo el segundo premio del Pulitzer para el 2015
Ay, Luis, aunque fuera la "cuchara de palo" del último premio literario me sentiría feliz. Si lo consigo, prometo dedicatorias personalizadas, ja ja.
EliminarMiles de besos