La chica del tren de Paula Hawkins

¡Buenos días!
Hoy, problemas informáticos aparte (por eso no pude subir ayer el post, que blogger estaba en modo "magia potagia" y hoy cruzo los dedos que es viernes trece ;)), os dejo con la reseña de la semana. Espero que la disfrutéis.

 

Rachel toma siempre el tren de las 8.04 h. Cada mañana lo mismo: el mismo paisaje, las mismas casas… y la misma parada en la señal roja. Son solo unos segundos, pero le permiten observar a una pareja desayunando tranquilamente en su terraza. Siente que los conoce y se inventa unos nombres para ellos: Jess y Jason. Su vida es perfecta, no como la suya. Pero un día ve algo. Sucede muy deprisa, pero es suficiente. ¿Y si Jess y Jason no son tan felices como ella cree? ¿Y si nada es lo que parece?
Tú no la conoces. Ella a ti, sí.

Lo sé. Sí. Iba avisada por Ana Blasfuemia, pero aún con todo decidí leerlo. ¿Por qué? Para aprender. Entre las críticas (algunas realmente feroces) que había encontrado de este libro descubrí algunos detalles que hicieron encenderse en mi cabeza la bombillita de “modo escritor”: puntos de vista en primera persona, secretos de los protagonistas que crean buena tensión narrativa… y como ya sabéis que ando inmersa en un interesantísimo y subyugante  taller de novela policiaca no pude resistirme a la tentación.


Así que tengo dos opiniones contrapuestas del mismo libro. Por una parte, como lectora y por otra como aprendiz. Como lectora os diré que esta novela me ha sorprendido (en la acepción más literal de la palabra). No termino de entender el fenómeno mediático que se ha creado a su alrededor porque, sinceramente, no me parece tan buena. Aunque claro, que D. Stephen King diga de la misma que le quitó el sueño y que no pudo dejar de leerla hasta la última página, es una publicidad sin parangón.

Entre sus puntos fuertes encuentro los giros narrativos, que están bien dispuestos, son sorprendentes y naturales dentro de un thriller como este. Ayudan a mantener la intriga durante el desarrollo de la historia, a la que sin embargo, creo que le falta ritmo.

Con claras reminiscencias a Hitchcook en La ventana indiscreta, Agatha Christie (de quien la autora se considera admiradora), Patricia Highsmith e incluso a Bridget Jones (sin la carga humorística del personaje), Paula Hawkins ha creado una historia sencilla, de fácil lectura y a mi modo de ver, bastante predecible, pero que le ha dado un resultado de diez.

Y con esto paso al modo aprendiz. ¿Por qué funciona esta novela?¿Qué tiene para que se hayan vendido tres millones de libros en menos de un mes? Bueno, pues intentaré analizar aquí el secreto de su éxito.

En primer lugar, los personajes. Creo que la autora ha acertado al dotar la historia de pocos personajes pero con muchísimos matices y oscuros secretos. No hay uno que se salve. Todos (excepto los policías y el bebé) tienen algo que ocultar o algo de lo que no se sienten especialmente orgullosos. Y aunque no son personajes especialmente empáticos, Hawkins ha dibujado una protagonista que parece ser un arquetipo característico de la sociedad londinense actual (y con la que el mundo anglosajón se identifica fácilmente): mujer adulta, de treinta y tantos, con sobrepeso, problemas de adicción al alcohol, ruptura amorosa no superada y provista además de un carácter débil (en serio, ¿no os recuerda a Bridget Jones?).

Por otra parte, Hawkins ha conseguido sembrar toda la historia con un buen ramillete de pistas falsas, que proporcionan al lector la semilla necesaria para que brote su curiosidad y reaccione creando hipótesis.También la narración desde la primera persona de las tres protagonistas femeninas crea cierta confusión y hace que el lector se enganche a la psique de cada una de ellas e intente desentrañar las verdades y mentiras de sus vidas.

Y claro, motivo fundamental: la campaña de marketing que se ha creado alrededor (algo habrá tenido que ver el tuit de King y las encomiendas de varias actrices famosas).

Pero siguiendo con el modo aprendiz, también me parece interesante mostrar en qué flaquea la novela. En mi opinión, le falta algo de pimienta y sal. Un poco de ritmo, más cercanía/empatía con los personajes, alguna subtrama que enriquezca la historia y que la identidad del asesino sea menos predecible.

Aún así, es una novela fácil de leer y agradable que

Te gustará si:

•  Buscas una lectura para desconectar, sin grandes pretensiones.
•  Te gustan los personajes con alma de perdedores.
•  Te atraen los equívocos y los narradores algo tramposos.

¿Y tú, lo has leído?¿Qué impresiones te produjo?

Feliz día.